De acuerdo con la Real Academia Española, resiliencia es la “capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos” o la “capacidad de un material, mecanismo o sistema para recuperar su estado inicial cuando ha cesado la perturbación a la que había estado sometido”.
Pero, ¿qué papel juega la resiliencia en el cáncer y por qué hablamos de ella?
El cáncer es una enfermedad que afecta psicológicamente a la persona que lo sufre y que también puede afligir a las personas de su entorno. Por eso, adoptar una actitud resiliente para afrontarla puede no solo reducir esos efectos psicológicos, sino también contribuir a su recuperación.
¿Cómo afecta el cáncer psicológicamente?
El diagnóstico de cáncer supone un alto impacto emocional lleno de cambios e incertidumbre. Ante esta situación, sentir ansiedad, irritabilidad, apatía, tristeza, depresión, miedo o negación son sentimientos comunes entre los pacientes con cáncer.
Sin embargo, muchos de estos sentimientos pueden perjudicar la recuperación del cáncer, al formar un círculo vicioso de difícil salida.
Para que esto no suceda, es esencial contar con apoyo social, médico y psicológico. Apoyarte en tus seres queridos y profesionales de la salud, te ayudará a sentirte acompañado, a entender tu situación y a identificar tus sentimientos.
Otro pilar esencial es tener compasión y empatía con uno mismo. Permítete sentirte mal sin culpa y, tal como recalcan desde la Asociación Española contra el Cáncer, hay que tener claro que “el cáncer no es una lucha y, para ser resiliente ante un proceso oncológico, hay que alejarnos de las metáforas bélicas”.
Recuerda que es importante apoyarte en los profesionales de la salud para entender más sobre la enfermedad. Gracias a ellos, podrás tener más conocimiento al respecto y, por tanto, contarás con más recursos para afrontar la situación. Además, reducirás la incertidumbre, así como otros sentimientos negativos como puede ser la ansiedad.
El estudio que relaciona los beneficios de la resiliencia para superar el cáncer
Un estudio de la Universidad de Málaga ha investigado los beneficios de afrontar la enfermedad con resiliencia y, aunque no haga referencia a toda la población oncológica, concluye lo siguiente:
- La evidencia empírica muestra que las personas más resilientes presentan mejor ajuste psicológico tras el diagnóstico de cáncer.
- La resiliencia destaca como habilidad necesaria para favorecer la readaptación a la vida lo más pronto y fácilmente posible.
- La intervención y apoyo psicológico orientado a fomentar la resiliencia se perfila como una herramienta imprescindible de cara a la calidad de vida del paciente con cáncer y del superviviente.
Por todo esto, la resiliencia puede ser un gran aliado y esa es una de las razones por las que le hemos puesto el nombre RESILIENCE a este proyecto de investigación en el que trabajamos para que las personas puedan sobrevivir al cáncer con un corazón más fuerte; además de ser las siglas de REmote iSchemic condItioning in Lymphoma PatIents REceiving ANthraCyclinEs (condicionamiento Isquémico Remoto para pacientes con Linfoma que reciben antraciclinas).
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