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El Doctor Alberto López responde algunas dudas sobre salud cardiovascular

Con motivo de la conmemoración del Día Europeo Para la Prevención del Riesgo Cardiovascular el día 14 de marzo, hemos lanzado una campaña en nuestro Instagram para recoger vuestras preguntas e inquietudes sobre este tema y que un miembro de nuestro equipo RESILIENCE, el Doctor Alberto López las responda.

El Dr. López es experto en Hematología en el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz y está especializado en el diagnóstico y tratamiento de los pacientes con linfoma y leucemia linfocítica crónica.

Queremos compartir los temas que se han planteado y animaros a escuchar sus respuestas en Instagram, así como a participar con vuestras preguntas en las próximas entrevistas abiertas RESILIENCE que realicemos en nuestras redes sociales.

¿Qué importancia tiene el ejercicio físico en la salud cardiovascular?

El ejercicio físico no solamente es importante a la hora de prevenir factores de riesgo cardiovascular, además de tener un impacto en el corazón, también lo tiene en los vasos, ya que reduce los niveles de colesterol y de glucosa, y es importante a la hora de enfrentarse a una neoplasia o a un proceso maligno. Contar con una buena forma física y con un buen tono muscular implica que el paciente desarrolle, de manera potencial, menos efectos adversos; muchos de los cuales tienen que ver con la salud cardiovascular, ya que los tratamientos que utilizamos suelen ser tóxicos.

¿Cuál es la relación directa entre el colesterol y las enfermedades cardiovasculares?

La relación directa que puede tener el colesterol como evento cardiovascular, es la formación de placas de ateromas que se forman en los vasos y van a impedir el correcto flujo sanguíneo. En los pacientes con linfoma o el paciente oncológico es importante tener, entre otros, estos factores controlados a la hora de afrontar terapias, ya que van a producir un mayor riesgo de clínica trombótica.

¿Cuáles son los principales factores de riesgo cardiovascular?

Los principales factores de riesgo cardiovascular son la mayoría modificables. Son la hipertensión arterial, el desarrollo de colesterol, el azúcar alto, conocido como diabetes, el sedentarismo, la obesidad; además de los hábitos tóxicos, como puede ser el tabaquismo o el consumo de alcohol. Es importante, antes de empezar un tratamiento oncológico, o en la población general, tener bien controlados todos estos factores a la hora de desarrollar menos efectos adversos al dar una terapia oncológica.

¿Cuáles son los signos de advertencia de enfermedad cardiovascular?

Uno de los signos de advertencia que podemos tener para imaginar que algo no va bien con nuestra salud cardiovascular puede ser la presencia de cefalea, dolor de cabeza, el aumento del diámetro de las piernas, que se nos hinchen a lo largo del día, o el hecho de tener todo el rato ganas de beber y de orinar, lo que puede indicar la presencia de una diabetes ya establecida. Éstos son signos y síntomas por los cuales deberíamos consultar con nuestro médico de atención primaria.

¿Qué pruebas médicas hay que hacer para evaluar la salud cardiovascular?

Las pruebas idóneas para evaluar la salud cardiovascular y los factores de riesgo son un control estricto de las mismas y esto se realiza por el médico de atención primaria: medir la tensión arterial, un electro y una analítica completa, con glucosa y un perfil lipídico, nos pueden orientar a conocer qué riesgo cardiovascular puede tener cada paciente.

¿Cómo puede ayudar la alimentación en la salud cardiovascular?

La alimentación juega un papel fundamental en la salud cardiovascular por varios motivos: por los niveles glucémicos de los alimentos que ingerimos y sobre todo por los niveles de colesterol. Una dieta mediterránea es una dieta idónea para tener a raya estos factores de riesgos cardiovascular y sobre todo siempre apoyada por el ejercicio físico.

¿Cómo influye el estrés en la salud cardiovascular?

El estrés, entre otras causas, tiene un impacto en la salud cardiovascular, tanto directo, como indirecto. Con el estrés se secreta más cortisol y más adrenalina, lo que aumenta la presión arterial y, de manera indirecta, también aumentamos los hábitos tóxicos, como fumar o comer compulsivamente. Por lo tanto, el estrés se podría considerar un factor de riesgo cardiovascular a tener en cuenta.

¡Muchas gracias a todos por enviarnos vuestras preguntas y al Doctor Alberto López por sus respuestas!

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